El hombro es el punto de unión entre el brazo y el tronco. Esta articulación está conformada por 3 huesos: el omóplato (escápula), el húmero (hueso de la parte superior del brazo) y la clavícula, además de diversos ligamentos, tendones y músculos que tienen la función principal de conectar la extremidad superior con el torso y permitir su movimiento. Aunque en muchas ocasiones se trate esta estructura como una articulación, es importante tener en cuenta que el hombro es un complejo articular compuesto por 2 grupos: el primero contiene la articulación glenohumeral y la articulación subdeltoidea, mientras que el segundo está compuesto por la articulación escapulotorácica.
El sobreúso diario, el desgaste o la aparición de una lesión pueden poner en peligro la integridad física y funcional del hombro a corto y largo plazo. Los esguinces, las distensiones, las dislocaciones, las torceduras, la tendinitis y la bursitis son algunos de los percances más habituales en este complejo articular, pero existen muchos más. En las siguientes líneas, se describen los usos, las aplicaciones y el procedimiento de la radiografía de hombro, una de las técnicas diagnósticas de rutina más empleadas en todo el mundo para la detección temprana de problemas en el sistema musculoesquelético.
¿Qué es la radiografía de hombro?
La radiografía es una técnica de diagnóstico por imagen que emplea rayos X, un tipo de radiación ionizante, para obtener imágenes del interior del cuerpo. Los rayos X emitidos durante esta prueba atraviesan el organismo y llegan a una placa radiográfica o una computadora, donde se crean las imágenes para su posterior interpretación por un radiólogo. Al tener diferente densidad, los órganos y tejidos absorben los rayos X en mayor o menor cantidad, lo cual permite su contraste y mejor observación. Los huesos se muestran en color blanco, las grasas son de tono gris oscuro, el agua es gris claro, y el aire-gases se muestran negros.
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La radiografía es una prueba rápida, indolora, de fácil acceso, y muy económica. Por este motivo, junto a la ecografía, supone la prueba imagenológica más empleada en todo el mundo para la detección de diferentes trastornos y patologías. De todas formas, hay que tener en cuenta que esta técnica emplea radiación ionizante, la cual puede acarrear diferentes riesgos si su exposición a ella es demasiado excesiva o si se realiza sobre una mujer embarazada. Antes de realizarte una radiografía, consulta cualquier contraindicación con tu profesional en salud de confianza.
Como su propio nombre lo indica, la radiografía de hombro es la técnica diagnóstica por imagen por rayos X para el estudio de esta región anatómica. Esto permite la evaluación del húmero (hueso del brazo), la escápula (omóplato), el acromion (fragmento óseo que se proyecta desde la escápula), la clavícula y la apófisis coracoides (fragmento óseo con forma de gancho que se proyecta desde la escápula). Una vez obtenidas las imágenes, el profesional médico examinará el tamaño, la posición y la forma de cada uno de estos huesos. Las fracturas, las calcificaciones y algunos tumores también son visibles en esta prueba.
¿Para qué se utiliza?
La radiografía de hombro está especialmente indicada en caso de dolor de hombro inespecífico, malestar localizado, o cuando se sospecha un síndrome de pinzamiento o una patología del manguito rotador. Esta prueba puede ser el primer paso para el diagnóstico de diversos trastornos y patologías, entre los que se encuentran:
- Artritis y artrosis.
- Tumores óseos benignos.
- Cáncer de huesos.
- Huesos rotos en la región del hombro.
- Bursitis (inflamación de las bolsas sinoviales).
- Hombro dislocado.
- Calcificaciones del manguito rotador (acumulación de calcio en el tendón del manguito rotador).
- Patología del manguito rotador.
A pesar de sus múltiples beneficios, es importante recalcar la baja capacidad de la radiografía de hombro para detectar lesiones de partes blandas (con la excepción de las calcificaciones tendinosas). El cartílago, los tendones, los nervios y los músculos son partes de gran interés del hombro, pero no son adecuadamente visibles en una radiografía y se pueden requerir otras pruebas para su evaluación (como ecografía o resonancia magnética).
Preparación previa
La mayoría de radiografías no requieren una preparación previa extensiva. Son pruebas rápidas, sencillas y que en muchos casos se realizan en el entorno ambulatorio. De todas formas, se pueden seguir ciertas recomendaciones para que el estudio sea lo más efectivo posible:
- Es recomendable dejar en casa toda joya, abalorio u objeto metálico, pues estos elementos podrían causar interferencias en la realización del estudio.
- Se recomienda acudir al centro el día de la prueba con ropa holgada y fácil de poner-quitar, pues es posible que se pida el cambio a una bata hospitalaria.
- En caso de tenerse, se recomienda acudir al centro el día de la prueba con todo informe médico relevante a la región del hombro o la patología sospechada. Esto puede ayudar a afinar el diagnóstico.
- Consulta con tu médico antes de la prueba cualquier medicamento, fármaco o suplemento que consumas de forma habitual.
¿Cómo se hace?
Para realizar la radiografía, el paciente debe quitarse cualquier objeto metálico que pueda interferir con la imagen y colocarse una bata hospitalaria si es necesario. Luego, se le posiciona de diferentes maneras según las proyecciones requeridas, que suelen incluir vistas anteroposterior, lateral y axilar. Durante la toma de imágenes, el paciente debe permanecer inmóvil y seguir las indicaciones del técnico radiólogo para garantizar una imagen clara y precisa.
El procedimiento es rápido e indoloro, y generalmente dura solo unos 5-10 minutos. Una vez obtenidas las imágenes, un radiólogo las analiza para detectar cualquier anomalía y redacta un informe para el médico tratante. En algunos casos, si se requiere mayor detalle de los tejidos blandos o estructuras internas, pueden solicitarse estudios complementarios como resonancia magnética o tomografía computarizada, tal y como se ha mencionado en líneas previas.
La radiografía de hombro es un estudio excelente para la detección de múltiples trastornos y enfermedades en este complejo articular. Ante cualquier duda sobre su utilización o viabilidad, te recomendamos ponerte en contacto con tu profesional médico de confianza.
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