Los 10 tipos de cáncer más comunes

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer es la principal causa de muerte en todo el mundo. Sin ir más lejos, en el año 2020 se le atribuyó a este conjunto patológico casi 10 millones de fallecimientos, o lo que es lo mismo, 1 de cada 6. Aunque la genética y el azar jueguen un papel muy importante en el desarrollo de un tumor maligno, hasta 1 de cada 3 cánceres se pueden explicar por factores controlables, como el consumo de tabaco, el alcoholismo, la obesidad, la falta de actividad física y más.

El cáncer ocurre cuando algunas células del cuerpo mutan, se multiplican sin control y se diseminan a otras partes del cuerpo. Es posible que este proceso comience en cualquier parte del ser humano y el grupo celular precursor dictamina su tipología. En las siguientes líneas, se exponen las características y signos tempranos de los 10 tipos de cáncer más comunes en el mundo.

1. Cáncer de mama

El cáncer de mama es el más común del mundo y solo en el año 2020 se dieron más de 2,2 millones de casos. Cerca de 1 de cada 12 mujeres experimentará esta neoplasia maligna en algún momento de su vida, por lo que no es de extrañar que se considere una de las principales causas de defunción en el género femenino. 1 de cada 3 cánceres en chicas son de mama.

Aunque los signos de este tipo de cáncer pueden ser distintos en cada persona, la aparición de un bulto en la mama o axila suele ser el aviso inicial. La irritación y el hundimiento de la piel mamaria, el dolor, el aumento de grosor de una mama y las secreciones anormales del pezón son otros signos generales. Ante cualquiera de estos síntomas, la visita al médico se hace necesaria.

2. Cáncer de pulmón

El tabaco mata hasta a la mitad de las personas que lo consumen. Esta afirmación no es difícil de interpretar, pues las personas que fuman cigarrillos son entre 15 y 30 veces más propensas a desarrollar cáncer de pulmón en comparación con la población general. El consumo asiduo de productos con tabaco es responsable de hasta 9 de cada 10 casos de cáncer de pulmón, así que la asociación es directa. Sin duda, una de las mejores cosas que puede hacer un ser humano es no fumar nunca (o dejar de hacerlo).

Uno de los síntomas iniciales más usuales del cáncer de pulmón es la aparición de una tos persistente que perdura en el tiempo. Este cuadro cursa con dolor en el pecho, dificultad para respirar, sibilancias, fatiga, pérdida de peso y hasta excreción de esputos sanguinolentos. El pronóstico no es muy positivo, pues la tasa de supervivencia a 5 años de todos los tipos combinados es de solo un 21%.

3. Cáncer colorrectal

El cáncer de colon y recto ocupa el tercer lugar a nivel global. La probabilidad de experimentarlo siendo hombre es de un 4,3% (1 en 23), mientras que en mujeres disminuye ligeramente a un 4,0% (1 en 25). El sobrepeso y la obesidad son uno de los factores de riesgo más claros para el desarrollo de esta enfermedad, pero existen bastantes más. Curiosamente, una alimentación rica en carnes rojas y ultraprocesadas se asocia a la aparición de cáncer colorrectal.

Entre los signos del cáncer de colon, destacan los cambios persistentes de hábitos intestinales, el sangrado rectal, la molestia abdominal persistente y la sensación de que el intestino no se vacía por completo al defecar. Por suerte, si se detecta a tiempo, este cáncer tiene una tasa de supervivencia superior al 91% a los 5 años del diagnóstico.

4. Cáncer de próstata

Igual que el cáncer de mama es uno de los tipos de cáncer comunes en mujeres, el cáncer de próstata destaca por su prevalencia en el género masculino (este órgano es exclusivo del hombre). Aproximadamente 1 de cada 8 hombres tendrá un cáncer de próstata a lo largo de su vida, pero por suerte la media de edad de diagnóstico es bastante avanzada (66 años). Este tumor maligno es la segunda causa de muerte en varones en regiones de alto ingreso como EE. UU, solo superado por el cáncer de pulmón.

Algunos de sus signos clínicos más frecuentes son la dificultad para orinar, el flujo de orina débil, el sangrado a través de la orina/el semen y la dificultad para vaciar la vejiga por completo. El pronóstico es mucho más positivo que para el cáncer de pulmón o el de colon: la tasa de supervivencia a 5 años para las personas con cáncer próstata es del 98%.

5. Cáncer de estómago

A partir de este punto, se exploran otros de los tipos de cáncer más comunes, pero con una prevalencia algo más baja. El cáncer de estómago es responsable de más de 1 millón de casos anuales y corresponde al 3,2% de todas las neoplasias que se diagnostican a nivel global. Además, los hombres tienen un riesgo algo mayor.

La pérdida de peso sin causa aparente, el poco apetito, la acidez y el dolor abdominal son algunos de los síntomas principales del cáncer de estómago. La tasa relativa de supervivencia a 5 años del diagnóstico es del 70%, pero cuando se consultan las variantes regionales y distantes el pronóstico es mucho peor. En estadios más avanzados, el cáncer de estómago se puede tratar, pero casi nunca es del todo curable.

6. Cáncer de hígado

Hasta el 60% de los casos de cáncer de hígado en regiones de alto ingreso están relacionados con un consumo excesivo de alcohol. Las infecciones por los virus de la hepatitis B y C, la cirrosis, la diabetes y otras complicaciones crónicas también pueden favorecer su aparición. Los pacientes con una cirrosis alcohólica tienen un cáncer de hígado en un 1,9-2,6% de los escenarios.

Este tipo de cáncer comparte síntomas con otros de los citados: pérdida de peso involuntaria, falta de apetito, dolor abdominal, debilidad, náuseas y más. Por desgracia, el pronóstico tampoco es demasiado favorable en este caso. La tasa de supervivencia combinada del cáncer de hígado a 5 años del diagnóstico es de un 31%.

7. Cáncer cervicouterino

El cáncer cervicouterino es otro de los tipos de cáncer comunes en la mujer. Se trata del cuarto tipo de neoplasia maligna más habitual en el género femenino, con más de 600 000 casos y 300 000 defunciones anuales. Es un cáncer que se puede detectar con mucha presteza y también es posible prevenir su aparición, por lo que no es de extrañar que hasta el 90% de pacientes y muertes tengan lugar en países de ingreso medio-bajo.

Dos tipos de virus del papiloma humano, los VPH-16 y VPH-18, provocan casi el 50% de las lesiones precancerosas en esta zona. La vacunación, las pruebas de cribado y los análisis de detección temprana son esenciales para acabar con esta enfermedad.

8. Cáncer de esófago

Este es otro de los tipos de cáncer más usuales, pero menos conocidos por la población general. El World Cancer Research Fund International (WCRF) estima que se producen algo más de 600 000 casos anuales de este tipo de cáncer, una cifra muy similar a la de la enfermedad anterior. El riesgo de padecerlo a lo largo de la vida es de aproximadamente 1 entre 125 en hombres y 1 entre 417 en mujeres.

Sus síntomas principales son problemas para tragar, dolor en el pecho, pérdida involuntaria de peso, ronquera, tos crónica y hasta sangrado esofágico. La tasa de supervivencia a 5 años del diagnóstico en todas sus etapas combinadas es de un 46%. Por desgracia, la enfermedad no se suele diagnosticar hasta que se ha diseminado, por lo que el índice de mortalidad general es muy alto.

9. Cáncer de tiroides

El cáncer de tiroides es una proliferación anormal de células que comienza en la glándula tiroidea, situada en la base del cuello. La mayoría de los cánceres tiroideos no provocan síntomas en sus etapas iniciales, pero a medida que crecen pueden generar bultos, cambios en la voz, dificultad para tragar, dolor en el cuello e hinchazón de los ganglios linfáticos.

En general, este cáncer se cura entre el 80 y el 90% de los casos. La cirugía, la terapia con yodo radioactivo y la radioterapia son algunos de los métodos más empleados para acabar con el cáncer de tiroides.

10. Cáncer de vejiga

Terminamos esta lista de los tipos de cáncer más comunes con el cáncer de vejiga, originado en el tejido de la vejiga urinaria. En España, se registran de 27 a 30 casos por cada 100 000 habitantes/año en hombres y de 3 a 5 casos por 100 000 habitantes/año en mujeres, además de generar unas 5 defunciones por cada 100 000 personas. Este tipo de cáncer merece ser conocido, pero sus cifras epidemiológicas son bastante bajas en comparación con otros elementos de esta lista.

Algunos de los síntomas más usuales son: coágulos de sangre en la orina, sensación de ardor al orinar, frecuenta de orinado aumentada, dolor en la región lumbar e incapacidad para liberar la orina. La tasa de supervivencia varía mucho según la diseminación del tumor.